sábado, 10 de agosto de 2024

Sobreviví

Siempre tardo en elegir los títulos de mis entradas, esta vez opté por el drama jaja

 

Hace un año terminé con las materias del doctorado; pero apenas en febrero presenté la tesis y mi título está pendiente porque detesto los trámites y no he encontrado voluntad para hacerlo… espero ya pronto terminarlo jaja 


Valió la pena todo el lloriqueo, la verdad… el sentirme inexperta, el sobre-esfuerzo con la estadística y etc. Gracias a esos conocimientos, estoy construyendo una base de datos y seguramente saldrá algo interesante… si se me abrió otro panorama para implementar dentro de la clínica (o quizá y hasta un poco afuera) 


Gracias a eso también conseguí un trabajo a distancia asesorando alumnos de maestría, la docencia es algo que siempre quiero tener en mi vida 




Hace un año también terminé mi proceso de análisis (o psicoterapia). Recuerdo que hace unos 5 años me decidí a empezarlo porque tuve una especie de ataque de pánico en un evento social. Digo “especie” porque honestamente no lo sentí como tan grave; es decir, no pensé que iba a morir o algo así, pero si me sentí muy abrumada como para querer salir corriendo. De hecho, en cierto sentido lo hice jaja montada en un Uber


Entre muchos aprendizajes que ya tengo tan introyectados como para mencionarlos.. Algo que si tengo muy presente fue el bajarle a la manía de creerme el centro del universo jaja 


Quizá suena tonto o simple plantearlo así, pero uno a veces cree (quizá sin mucha consciencia) que las respuestas del otro ocurren exclusivamente por lo que uno hace o dice. Pero, realmente, el otro carga con su historia personal que lo mueve a responder de tal o cual manera. Entonces es quitarse un peso de responsabilidades que uno se adjudica y que no corresponde


Me siento una persona más tolerante gracias a eso




Hace poco más de un mes tuve una cirugía para corregir mi tabique desviado, porque ya había tenido complicaciones por sinusitis. Y todo iba bien.. la cirugía, la recuperación 


Pero al sexto día me empezó una hemorragia profusa, así.. sin hacer esfuerzo ni nada, solo desperté con la sensación de escurrimiento nasal. Estaba sola, pero se movilizaron y me llevaron de urgencia con la otorrino y me puso unos tapones. La experiencia más dolorosa, sin duda, que he vivido… físicamente hablando, cabe aclarar jaja 


De vuelta a casa mi nariz decidió que quería seguir sangrando y me llevaron de vuelta a consulta, otra vez me pusieron tapones auuuuuun más dolorosos que los anteriores. Ahí si, cuando quise pararme ya no se pudo.. por la pérdida de sangre



Como persona creyente puedo decir que gracias a Dios, uno de los médicos (esta segunda vez ya había un equipo) tenía un medicamento que pudo sacarme del choque. Igual por la descompensación ya tuvieron que internarme y las cosas se pusieron delicadas 


Afortunadamente tuve un excelente equipo médico de mi lado y me dieron de alta el mismo día, solo que ya en la noche. Después siguieron pequeñas metas y plazos de la recuperación, ya no tuve alguna otra eventualidad.. y pude salir viva de todo eso 


Algo curioso es que tardé en captar la seriedad de lo que había pasado, hasta que lo fui contando o también cuando vi el susto que se había desatado


Que, de hecho, no quise contarlo mucho para no andar asustando gente… lo publico aquí, a sabiendas que pocas personas se dan tiempo de leer(me). Mi blog ya se ha vuelto más un registro personal que otra cosa 





Y ahora pienso qué tan desatinado es que en un mismo post hablo sobre el doctorado, la terapia y una experiencia cercana a la muerte jaja 



pero creo que el hilo conductor, a final de cuentas, es que todas son experiencias; que uno vive y se superan. No tanto porque seas fuerte o resiliente… o sea, si, igual y hay algo de eso.. pero honestamente sentí que las atravesé hasta en algún modo como un .. “esto es lo que sigue, hay que cumplirlo”. Como sobreviviendo..


Ojalá hubiera seguido estudiando psicoanálisis para hacer una deducción más interesante sobre las pulsiones de vida en este punto, pero buehh



Solo es contrastaste que el doctorado y la terapia llevaron un proceso más “electivo consciente”, estuve muy al tanto de lo que pasaba y con completa reflexión. En cambio, en la hemorragia no pensé o tomé decisiones muy conscientes, fue más la inercia 





En todos casos, aquí andamos. Más investigadores, más conscientes y más derechitos del tabique jaja


Me encanta hablar en plural, así abarco mis personalidades :P



Ya tenía pendiente que quería escribir en *mi querido blog* sobre el cierre de doctorado y de la terapia. Pero el último incidente y la urgencia de desahogarme (aún más) terminó acelerando ese paso jaja




No quiero cerrar con más mensajes sobre aprendizaje de vida. Que aburrido, no? Pero si quiero cerrar con un momento de apreciación porque en las tres situaciones mi red de apoyo me acompañó y me sostuvo a flote y agradezco a Dios por todos ellos <3


miércoles, 19 de abril de 2023

Química y conexiones

Hace poco estuve leyendo uno de mis primeros escritos del Blog donde intenté describir las relaciones personales y me sorprendió recordar las ideas de una Nohemí de 18-19 años. Luego me llevó a reflexionar sobre los cambios de mentalidad que he venido teniendo.


Es interesante ver esas tormentas mentales que uno experimenta en la adolescencia y el cómo, poco a poco, los pensamientos van evolucionando hasta volverse en creencias más sólidas o estables


Cuando trato de rastrear un origen a esas evoluciones del pensamiento, creo que una parte fundamental son las personas con las que nos vamos rodeando y con las que compartimos experiencias. 

Las caprichosas conexiones que vamos entablando



Sin la intención de sonar muy cursi... bueh, ¡¿A quién engaño?! Si suelo ser bastante cursi para escribir mis ideas; pero creo que las conexiones que establecemos con otros son lo más cercano a la magia del mundo real


Un buen día coincides en algún tiempo y espacio con alguien, compartes alguna charla y percibes cierto grado de afinidad


Es como si uno fuera una pieza con un engranaje único y las otras personas terminan “encajando" de una u otra forma contigo; con tu manera de pensar, con tus gustos, pasatiempos.. Por eso me parece que el adjetivo de “caprichoso" queda muy bien aquí, porque es por un sinfín de factores que uno logra conectar o no con la otra persona. Y con una determinada intensidad...


La tan sonada “química"


Me he preguntado qué cosas son las que me llevan a establecer conexiones profundas con ciertas personas.. ahora no estoy segura que exista un parámetro para medir la profundidad. Más bien, creo que me relaciono mucho por medio del lenguaje; y si el lenguaje viene a ser la base de la consciencia, puedo decir que mis relaciones más íntimas son por medio de ese vínculo consciente/verbal 



Recuerdo que durante mis primeros años en Reynosa me rodeé de gente muy introvertida, hasta que en la preparatoria cambié el típico círculo de amigos con los que me juntaba y empecé a "incursionar" con personas más extrovertidas (probablemente el típico caso de introvertida adoptada jaja). 


La verdad agradezco infinitamente haber dado ese cambio, dejar atrás prejuicios que tenía y empezar a relacionarme con gente aunque fuera muy distinta a mí. Esas conexiones y experiencias fueron las que me ayudaron a ir dejando zonas de confort

Justo fueron las conexiones con mis amigos de la prepa las que me impulsaron para irme a estudiar la carrera en Monterrey, antes ni me había pasado por la mente. Ni me sentía lo suficientemente valiente para separarme de mi familia...



Estas últimas semanas he estado en varias reuniones sociales aquí en Guadalajara y he comenzado a sentir una cómoda familiaridad


Tengo casi tres años aquí, es la cuarta ciudad en la que vivo y estoy sintiendo enlaces más profundos con un grupo más grande de personas (al inicio de confianza sólo tenía a una de mis mejores amigas jaja)

De hecho, hace poco dijeron algo en referencia a este punto, me describieron con un “ha vivido en varias ciudades.. pero en ninguna se ha quedado"


He sentido algo similar a lo que sentí en Monterrey y que creo que me hizo quedarme más tiempo, me he sentido como “adoptada"


La ciudad es bonita, el clima es mucho más amigable (excepto este último mes, pero bueh.. igual no se compara con el calor norteño jaja)... y la gente es muy linda, he encontrado personas muy buenas. Aparte, comencé mi práctica clínica en consultorio y todo ha fluido de una forma, taaan.. natural o espontánea. Me siento contenta con eso



Recuerdo muy bien que cuando fui a Reynosa en mis primeras vacaciones de la maestría le estaba contando a mi mamá de los nuevos amigos que tenía y ella me dijo algo como de que “tuviera cuidado" porque me encariño muy fácil y después sufro mucho las pérdidas, y me subrayó la temporalidad de mi estancia en Puebla (mi plan siempre fue ir solo a estudiar la maestría, o sea solo estaría dos años)

Entendí su punto, no quería verme sufrir y estoy consciente que, aunque no soy la persona más social y extrovertida, las relaciones que suelo establecer son íntimas y me suelo apegar mucho. Supongo que también tiene relación con el hecho de vivir en ciudades donde no se tienen los típicos enlaces sanguíneos


De igual manera no me sentí con la voluntad de “mantenerme al margen" (si es que se puede) de las relaciones y no hacer amigos importantes durante mi estancia en Puebla



He hecho las paces con la idea de que no todos los amigos que fueron muy cercanos en ciertos momentos de mi vida se van a quedar para siempre; de hecho si me he terminado distanciando de personas que fueron súper amigos y que después ya no compaginábamos tan bien o había otras circunstancias que nos iban separando. Pero eso no quita que hayan sido importantes en su tiempo y siento agradecimiento por los momentos compartidos y todo. Por las conexiones y experiencias..


Que loco pensar en cómo el hecho de convivir con personas que te impulsan a hacer cosas distintas a las que estás acostumbrado, hace que encuentres nuevos “gustos" o que veas el mundo un poquito más diferente y ya con eso, marcan tu vida.. hasta pudiendo darle otro rumbo. Terminamos siendo construcciones de todo lo que esas personas y las experiencias nos van aportando..


He ahí la magia, de una coincidencia en espacio/tiempo, se da una conversación.. una relación.. una conexión.. que te hace incursionar en otras cosas, dandole otra dirección a tu camino


Sólo me queda un sabor de nostalgia, todas esas personas importantes.. esas “conexiones" que alguna vez formaron parte de mí y que moldearon mis percepciones del mundo.. ahora parecen estar regadas en varias ciudades. Y de cierta forma es como vivir día a día con alguna sensación de que algo te hace falta

Pero consuela saber que, aunque el contacto ya no sea diario o con frecuencia, en varias ciudades tengo personas valiosas para mí, con las que sé que puedo contar. Las que me siguen enseñando a caminar diferente...


Ahora puedo ver en retrospectiva y estar agradecida con Dios por toda esa gente que me acompañó una parte del camino, que impactó de alguna manera mi vida y me sacaron de mis "zonas".



Quizá también tiene que ver con la edad, ya puedo decir como decía Dumbledore..



Enfinnnn, que bonito caminar con consciencia... necesitaba venir a decirlo por aquí

miércoles, 28 de diciembre de 2022

Un café con mi fantasma

Hace poco tuve un malentendido que me llevó a reflexionar varias cosas y mi primer pensamiento fue escribir acerca de ello, porque siempre me da bastante alivio hacerlo... luego pensé “nahhh, creo que es muy personal”

 

Tres doritos después y heme aquí jaja

 

La verdad me relajé un tanto porque, aunque comparto mi blog en Facebook, la privacidad de mis publicaciones me permite estar más tranquila con la idea de escribir aquí. Además, ni que fuera tan popular ¿verdad? jaja y a eso hay que sumarle que no hay mucha interacción con los blogs o los escritos en estos tiempos. Ahorita todo se centra mucho en imágenes, historias de Instagram

Yo soy malísima con esas cosas; una vez que estaba de vacaciones, una amiga me pidió que le tomara una foto y le terminé tomando una foto donde ella salía sin cabeza... Parece chiste, pero es anécdota

Así de mala soy con la fotografía, jaja. De todas formas, si me parece interesante la dedicación que se le pone a obtener la mejor toma y el enganche que genera la documentación de momentos temporales en las redes sociales. Y no es crítica, tampoco pienso que sea algo “superficial” como algunos lo catalogan. Creo que a final de cuentas yo hago algo equivalente con la dedicación de escribir mis entradas o algún tweet. Y a veces siento que expongo mucho de mi al escribir, pero bueno... total, mi blog siempre ha sido muy personal

 

Parece que toda esta introducción es un desvío de tema, yo sieeeempre me desvío de temas. Pero esta vez si voy a un punto... Creo ...

El punto es que cuando uno escribe es como si materializaras tus pensamientos, como si se hicieran más “reales”. Además, de cierta forma, al exponerlo te vuelves vulnerable al que te lee, te abres al juicio del otro. Me recuerda una canción de Anna Nalick en donde dice algo estilo que “las palabras de su canción son como su diario hablando en voz alta y que quien las escuche podrá interpretarlas como quiera”. Que preciso, ¿no?

 

Como decía, hace poco tuve una reacción impulsiva ante una situación aparentemente de lo más equis... y al hablarlo con mi mejor amiga, ella me cuestionó específicamente qué era lo que me había hecho enojar *pausa de agradecimiento con Dios por contar con una amiga que sabe que me siento escuchada si me hace preguntas cuando le cuento algo*

E intentando responderle fue que me di cuenta que la situación me despertó un fantasma, me tocó una fibra sensible. No recuerdo cuando empezó, pero tengo una inseguridad latente de poder llegar a ser una persona aburrida

 

Y ahí hay dos puntos importantes que puedo rastrear, el primero es que crecí en un hogar cristiano y de cierta forma no llevé el típico desarrollo social, de ir a fiestas, bailar y esas cosas comunes. Ademaaas (no sé si consecuencia, agregado o que), tengo una personalidad bastante introvertida

Siendo honestos, el ser extrovertido es bastante recompensado en la sociedad; las personas suelen valorar a la gente que habla alto, que se conducen con seguridad y espontaneidad. Quizá me he rodeado de gente muy extrovertida, pero a veces es fácil que me sienta como “fuera de lugar”

 

Yo creo que crecí quizá con esa inseguridad de sentirme diferente y luego (para colmo jaja), durante la adolescencia, una amiga muy cercana alguna vez me dijo “tú sólo quieres hablar, y a mí solo hablar a veces me aburre” y desde ese punto pienso que le di un nombre a esa sensación. Una parte de mi comenzó a tener miedo de ser “aburrida” para los demás

 

Y lo estoy escribiendo no para que alguien venga y me dé palmaditas en el hombro o me reafirme que no soy aburrida, para naaada. Solo quiero ser transparente al describirlo tal cual

 

Aparte, me gusta como le queda el término de “fantasma” a esa sensación, porque realmente no parece estar en una especie de registro consciente; como algo que yo pueda controlar o moldear por mi forma de pensar. Más bien, aparece cuando intento darle sentido a mis enojos o tristezas. Pasa algo, lo percibo de cierta manera, reacciono (a veces) y después, meditando los por qués, es cuando puedo ver que la raíz de mi reacción fue ese miedo inconsciente

Y en este punto pasa algo similar a lo que decía sobre escribir; poner en palabras esa sensación, hace que pase por un filtro más “consciente”, pareciera que lo hace más real

 

En varias ocasiones mi terapeuta me ha comentado sobre una tendencia que tengo de evitación hacia las relaciones y se ha encontrado la raíz con el hecho de que durante mi crianza tuve una sobre-atención que me generó cierto desgaste hacia las demandas sociales. Pero creo que también entra este fantasma aquí

A mí me encanta estar disponible para apoyar y escuchar a mis amigos, les doy mucha importancia. Pero cuando se trata de mí, la verdad algunas veces me cuesta externar mis propias batallas o pedir ayuda y es quizá por eso... pudiera ser que me da algo de pendiente ser una carga o aburrir. Sé que mis amigos también me escuchan y me apoyan al mil, solo si pienso que es factible que pudiera ser esa inseguridad escondida en algún lado dentro de mí la que me frene al dialogo

 

Y eso me ha estado rondando la cabeza últimamente, porque no es algo de ahorita. Es algo que ya estaba ahí y que en ciertos momentos se vuelve a activar

 

Sin duda que una ventaja de estar llevando un proceso terapéutico es preciso eso... reconocer tus fantasmas, miedos, inseguridades; rastrearles las posibles explicaciones, entenderlos y aprender a sobrellevarlos cuando aparezcan. Echarte un cafecito con ellos para darles un espacio de escucha. También implica asumir responsabilidades una vez que te das cuenta que reaccionaste de tal o cual manera porque te tocó esa fibra sensible, saber que quizá las otras personas no tuvieron por completo la “culpa” realmente y aprender a pedir disculpas

Al final, supongo que todos cargamos con nuestros fantasmas; con esos registros inconscientes que muchas veces son las explicaciones del por qué ciertas conductas o palabras del otro nos “calan”, nos hacen enojar o poner tristes

 

Tengo como cinco años que empecé a escribir propósitos para cada año, y siempre el primero que pongo es mantener contacto con las personas importantes. Y lo que me pasó en estos días es un ejemplo claro de una buena razón para hacerlo. Cuando externas lo que pasó con alguien, te da la posibilidad de digerirlo y desmenuzarlo. Y luego ir a escribirlo en tu blog jaja

Y ya habiéndolo puesto en palabras, la verdad puedo razonar que, a final de cuentas, no se puede hablar en términos absolutistas, seguramente no existe una persona que es diversión o aburrimiento el 100% del tiempo. Capaz y sólo debo aceptar que yo puedo ser un 70-30 y ya jaja

 

Otro propósito frecuente de mis listas es escribir más seguido. Este 2022 no lo incluí e irónicamente escribí más jaja así que creo que este 2023 lo dejaré como simplemente escribir cuando quiera pasar por el registro consciente los caos mentales o andar cazando fantasmas...